¡Hola, pocketer@s!
En esta entrada os voy a hablar de la novela que inspiró a la película de Blade Runner. Y digo inspiró porque se tomaron ideas del libro para la grabación de la película y no se adaptó como tal.
Esta lectura la tenía pendiente para leer durante este año sin embargo, se adelantó antes de tiempo porque aproveché la lectura conjunta de esta novela que organizó Novela y Acción. Me ha encantado compartir distintas opiniones con todos los lectores sobre esta historia futurista porque, además, eso ha ayudado a crear mi propia reflexión, ya que tiene tantos detalles desconocidos que se hace difícil entenderlos, y el hecho de que cada lector se fijé más en unos que en otros, te permite estar más atenta a cada idea.
Philip K. Dick, escritor y novelista de ciencia ficción, es conocido en sus libros por tratar temas como la sociología, la política y metafísica. Escritor de treinta y seis novelas y 121 relatos cortos, no fue reconocido por su trabajo hasta después de su muerte cuando se adaptó la novela con la que se ganó el reconocimiento y el respeto público. Esta novela es de la que os voy a hablar en las siguientes líneas, '¿Sueñas los androides con ovejas eléctricas?'.
Titulo: ¿Sueñas los androides con ovejas eléctricas?
Autor: Philip K. Dick
Género: Ciencia ficción
Páginas: 357
Una agradable y ligera descarga eléctrica, activada por la alarma automática del Climatizador de Ánimo Penfield, despierta a Rick Deckard, que deja la cama ataviado con su pijama multicolor y apremia a su esposa a que reajuste su climatizador para sentir deseos de levantarse. Deckard es un cazarrecompensas, trabaja para el Departamento de Policía de San Francisco retirando androides de las calles. Vive en una Tierra prácticamente desierta desde que los seres humanos han emigrado a la nueva colonia en Marte después de la Guerra Mundial Definitiva. Los pocos que aún quedan en nuestro planeta buscan poseer carísimos animales, a través de ellos sienten la empatía que los diferencia de los androides. Sin embargo, Deckard sufre por no poder permitirse económicamente uno y finge cuidar de una oveja auténtica cuando en realidad es solo un ejemplar eléctrico. Ataviado con su modelo Ajax de Calzón de Plomo Mountibank contra el polvo radiactivo, se encamina al trabajo, descubre que su superior está en el hospital con una herida de láser en el espinazo y recibe la orden de perseguir al nuevo androide que ha podido ser el responsable, el Nexus-6 de cerebro altamente sofisticado.
MI OPINIÓN
Lo cierto es que no sé por donde empezar con esta historia porque son tantas cosas en las que podría centrarme que necesito organizar todas las ideas de las que os quiero hablar. Así que voy a ir poquito a poco.
Como punto inicial sabemos que es un libro en el que aparecen androides, todo gira en este mundo donde conviven humanos y robots. Como segundo punto, que considero es el más importante y en el que se centra toda la historia y el mundo que ha creado el autor, es la empatía. Desde mi punto vista, Philip ha utilizado a los androides para hablarnos de un tema atemporal como es la empatía, dejando a esta tecnología avanzada como segundo plano (sin adentrarnos en si es o no ético la creación de androides).. Y sí, atemporal. Si has investigado un poco sobre el autor, habrás visto que nació en 1928. Esto significa que sabe de lo que habla con respecto a la guerra y sus consecuencias; y como indica la sinopsis, la historia transcurre tras una guerra.
Dentro de este mundo hay espacio para una fe en la que los humanos creen: el mercerismo. El libro no habla con tanto detalle sobre esta 'religión' que persigue y promulga la empatía en los humanos pero hace acto de presencia lo justo y necesario para entender que el ser humano siempre necesita de 'algo' que le ayude y le recuerde lo qué es para diferenciarse de los androides. Curioso es que los personajes humanos de la novela se conectan, como si de una wifi se tratara y se introdujera en un foro, a una caja de empatía que le permite compartir con otros humanos sus penas y alegrías, y que el resto de oyentes sientan esa alegría o pena como quien la vive. Este movimiento religioso como es el mercerismo es a lo sumo, cualquier religión de la vida real (cada una con sus éticas) y que ante una situación catastrófica que vive el ser humano, necesita apoyarse en ese 'algo' para sentirse seguro, realizando, supuestamente, buenas acciones y vivo. Esto es lo que les diferenciarían de los androides. Debería.
La vida de nuestro protagonista, el cazarrecompensas Rick, transcurre en un día a día buscando a androides que han llegado a la Tierra escapando de Marte, donde están los humanos privilegiados que han podido abandonar su planeta que ha quedado destruido tras la guerra. ¿Exactamente de qué escapan los androides? La respuesta es bien sencilla. Si te sitúas en la actualidad, donde los androides aún están en proceso de construcción, te darás cuenta para qué se están creando: para ayudar en trabajos pesados y como apoyo al ser humano en actividades más cotidianas de la vida diaria. Lo mismo ocurre en Marte; los androides son esclavos de los humanos quienes tiene una vida lujosa allí. Mientras que los humanos que siguen viviendo, y morirán, en la Tierra, no tienen tantas ventajas como los de arriba por ser especiales. Entiéndase la ironía de especiales en esta novela. Los especiales son los que no merecen tener una vida llena de lujos y facilidades, y quienes van a sufrir mucho más las consecuencias de una guerra.
Retomando a los androides, estos escapan de una esclavitud en Marte para ser perseguidos en la Tierra por ser lo que son, robots. Perseguidos y asesinados por sus propios creadores y eso que los androides tienen una vida limitada y programada.
Rick, a partir del test Voigt-Kampff, diagnostica si un persona determinada es un androide o un humano. Las diferencias son mínimas porque los Nexus-6 -lo último en tecnología- son prácticamente iguales a los seres humanos, pero este test permite analizar el tiempo de reacción ante una situación figurada en la que siempre aparecen representados los animales. Es decir, mide la empatía de quien es evaluado. ¿Por qué animales? La guerra trajo consigo la extinción de casi todos los animales que existían, y los pocos que sobrevivieron están muy protegidos por la sociedad. Si te interesa tener uno, tendrás que pagar un dineral para poder disfrutar de la naturaleza y de tu propia empatía. De ahí que el test que aplica Rick, se centra en sucesos relacionados con los animales porque en este mundo el ser humano siente la empatía con más naturalidad y espontaneidad al saber de la desaparición de los animales en la Tierra.
A partir de aquí, cuando Rick descubre a un androide le persigue hasta matarle. Como adivinarás, los androides harán todo lo posible para esconderse y no ser pillados por los cazarrecompensas. Y esa es la historia en si, con todas las aventuras que conlleva descubrir quién es androide y quién no lo es, si conseguirá matarlos o no, e incluso, hacerte pensar de que lado estás como lector. Puedes pensar ¿y ya está? Bueno, puedo hablarte sobre mi reflexión final al respecto para que interiorices más en los personajes y en lo que el autor nos quiere mostrar con su novela y lo haré, pero te aviso que puede contener spoilers.
Para empezar, me gustaría destacar la religión. Puedes pertenecer a una en concreto o puede que no formes parte de una de ellas. Independientemente de esto, estoy segura de que eres consciente que según que religión, unas hablan más de tener empatía, del amor al prójimo y, por consiguiente, de la aceptación del otro. Aún así, la empatía pertenece de forma natural al ser humano pero el mundo es como es y tiende a hacernos olvidar amar a los demás por el simple hecho de ser personas (sea este amor el que sea).
Nos resulta mucho más fácil amar a lo conocido e igual a nosotros mismos. En la novela los humanos aman a los humanos y en la vida real todos somos humanos pero por prejuicios no queremos tener relación con determinados grupos (en la novela estos grupos son los androides) y por desconocimiento tendemos a desconfiar del otro. Un ejemplo más que claro, es que cuando alguien desconocido se nos acerca para preguntarnos por una calle, lo primero que hacemos es activar una alarma en nuestro cerebro por si acaso, no vaya a ser que nos ataque. Y si este desconocido, desde nuestra perspectiva, consideramos que es de una clase inferior por raza, sexo, religión y social, ya no te digo como esa alarma puede llegar a duplicarse. En la novela, esta alarma se refleja en si el otro será androide o no, si tendrá empatía o no, o bien, si será mercenario o no. La empatía, ante estas situaciones, disminuye de forma exponencial.
E incluso ante un mundo prácticamente destruido, el ser humano no es capaz de mantener la empatía sin la ayuda de ese 'algo', en este caso, necesitan de la caja empática para recordarlo; en la vida real, hay que ir a misa...
¿Realmente necesitamos de esa fe para sentir empatía? Sería ridículo pensar que sí pues como he dicho, la empatía forma parte de las personas. De hecho, en la novela hay humanos que conviven en paz con los androides y los aceptan sean en forma de humano o en forma de animal, no los ven como enemigos; sino, todos serían cazarrecompensas y se chivarían, cosa que no ocurre.
Si nos fijamos bien, son empresas las que se dedican a la caza de androides y a controlar la ciudad manteniéndola segura de ellos. ¿Te suena en la vida real?
Ahora solo queda hacerte una pregunta: ¿Quién tiene más empatía? ¿El que fue creado por los humanos o el humano que necesita de una religión para amar? Lo cierto es que el androide solo se defiende cuando van a matarlo, sino es así, el androide busca tener una vida tranquila como cualquier otro humano. ¿Te sigue sonando?
Rick, una vez que él mismo es Mercer, cosa que entiendo como que ha alcanzado la empatía por completo - pues Mercer es como el dios de la empatía -, ya vive tranquilo. Le permite convivir con los androides que no son enemigos, e incluso comprender a Rachel por lo que hace con su cabra. Rick decide no ir a por ella, no vengarse por lo que ha hecho, puesto que el círculo seguiría existiendo sin tener ninguna salida a esta situación. Rick, acepta y vive.
Es un libro que requiere adentrarse en un mundo más allá de los androides. Puedes leerlo sin este objetivo y tomártelo como una historia más de robots y humanos y sin más complicaciones, pero te puede resultar interesante interiorizar más en estos aspectos que te he destacado en la reseña, observando cómo el autor ha reflejado los temas de los que trata en sus novelas y relatos como son la sociología, la política y la metafísica que te he indicado al principio de este post. Visualizarlo teniendo en cuenta dichos temas, te llevará a un libro totalmente distinto y no tan sencillo como puede aparentar en un principio. Quizás por eso, su reconocimiento no vino después de su muerte y ahora entenderás más porque digo que es una novela atemporal. Aunque te recuerdo que esta es mi reflexión que puede coincidir con la tuya o no; depende de cómo analices cada punto y hacia dónde lo dirijas.
Philip R. Dick ha sabido entrelazar cada detalle para que el lector dude sobre su propia teoría, que va formando a medida que lee, sobre cada personaje. De hecho, al terminar la lectura siempre tendrás la duda sobre quien es androide y quien no, exceptuando aquellos que nos dice directamente lo qué son, además de otros puntos interesantes que aparecen en la novela. Este hecho posiblemente sea porque saber si alguien es androide o humano no es lo importante de toda esta historia, sino la empatía, el amor al prójimo y abrir los ojos sobre la sociedad en la que vivimos donde las jerarquías marcan la diferencia entre unos y otros. La empatía no distingue, no aísla, no discrimina. No hace falta llegar a una guerra literal para ver estas diferencias entre nosotros; hay otro tipo de guerras que nos las muestran y que han existido a lo largo de toda la historia. Ya sabes: aceptar te hace libre.
Valoración: 5 sobre 5
Nota: la edición del libro por la editorial Cátedra tiene 357 páginas, pero no es hasta la página 122 que empieza la novela.